NIÑOS QUE RECHAZAN AL PADRE

 Hay niños que rechazan a papá o mama en algún momento de su desarrollo, especialmente cuando si madre está presente. No es que no lo quieran, o que no sean capaces de pasar ratos estupendos con su padre, no quiere que se le acerque y se pega con desesperación a la mamá. El padre se siente apartado y puede reaccionar con despecho, considerando que el niño está demasiado apegado y que la madre lo sobreprotege.

Es una etapa más del desarrollo psicológico infantil. No debe ser vivida como un problema, aunque se conjuguen intensos sentimientos en la familia. Aunque no todos los niños pasan por ella hay que estar preparados, especialmente si el papel del padre en la crianza no ha sido de gran implicación. Esto no es personal, ni que el otro es mejor papá o mamá que tú, sino que es una reacción pasajera del bebé en el desarrollo de su cerebro, como causa de que sus sentimientos no pueden abarcar tanto.

Los factores que influyen al rechazo a papá suelen ser muchos, quizá una ligera falta de implicación del padre, que no lo vea mucho a lo largo del día, que la madre se haya incorporado al trabajo, lo que provoca que el niño cuando esté ella no se separe de la mamá al echarle en falta, que tenga poca autoestima… Para un niño pequeño su madre es lo principal y separarle de ella puede provocarle tensión, estrés, angustia, desencadenando muchas veces en rabietas.

Cuando cumplen los dos años, muchas veces sufren una regresión en su comportamiento, quieren alejarse, investigar, dicen que no a todo y se apretujan contra la madre a la vez que quiere explorar el mundo. En esta etapa hay que tener paciencia, el padre debe comenzar a interactuar con el niño poco a poco, ocupando parte de su tiempo, jugando con él para que el alejamiento de la madre sea algo progresivo y evitemos así el rechazo a papá. El niño debe sentirse seguro y ver a su padre como alguien en quien confiar, estando siempre ahí, sin enfadarse ni imponerse cuando sea rechazado, sino con paciencia, mostrándole su amor. Practicar actividades juntos ayudará a pasar esta etapa de transición y a acercarse más el padre y el hijo.

 

TOMA UN DESCANSO Y SAL DEL FOCO DE ATENCIÓN

Por lo general, el que está fuera de casa trabajando es a quien el bebé rechaza. Si esto es así, te aconsejamos que cuando papá o mamá lleguen del trabajo o durante los fines de semana, este sea el momento de ocupar un espacio activo y protagónico en el proceso de crianza, mientras la otra parte pueda salir del foco de atención.

Incluso puede ser un buen momento para recargar baterías, como un merecido descanso. Estas acciones le ayudan al niño a asimilar que papá y mamá tienen el mismo nivel de importancia en su crianza.

Nunca se debe de imitar lo que hace el otro padre. De hecho, si eres a quien el bebé rechaza, intenta hacer un momento especial, solo contigo y muy diferente al de tu compañero o compañera. La originalidad y novedad es lo que cuenta.